El color de nuestras encías es un excelente indicador de la salud de nuestra boca, pero también de la salud de nuestro cuerpo. En general, las encías blancas, rojas o amarillas son un síntoma de alguna patología relacionada con la cavidad bucal, mientras que las encías que van del rosa claro al rosa oscuro son sinónimo de salud.
Mantener el color de nuestras encías bajo control, por lo tanto, es una manera de mantener nuestra salud bajo control y gracias a su apariencia podemos notar cualquier anomalía y problemas y acudir a un dentista para un diagnóstico y tratamiento adecuado.
En general, los colores considerados saludables son el rosa y sus matices, pero mucho depende también de factores genéticos, el color de nuestra piel o incluso la exposición a la luz solar. Así que vamos a ver qué colores pueden tomar nuestras encías, cuál es su significado y qué podemos hacer para prevenir las enfermedades bucales y mantener nuestra sonrisa sana y hermosa.
Los colores de las encías:
- Rosa: Las encías de color rosa con una apariencia firme y tonificada son un signo de buena salud y cuidado.
- Marrón: las encías marrones pueden ser causadas por la exposición a la luz solar. Los rayos del sol también pueden estimular la producción de melanina en las encías. Sin embargo, es importante controlar su apariencia y, sobre todo, que el borde alrededor de los dientes no cambie de color. Independientemente de su color natural, las encías deben seguir siendo firmes y lisas. Si tienes una piel naturalmente oscura, tus encías normalmente pueden tener este color.
- Rojo: Cuando las encías aparecen rojas, puede ser una inflamación o una infección. Normalmente, cuando las encías son de este color, también son más sensibles y se pueden sangrar cuando te cepillas los dientes o utilizas el hilo dental. La mejor solución en este caso es consultar a tu dentista para encontrar el tratamiento más adecuado.
- Amarillo: Si tus encías se ven amarillas, o tienen una pátina amarillenta, entonces probablemente estamos hablando de gingivitis. Esta patología es bastante común, también suele estar acompañada de otros síntomas como la hinchazón e inflamación de las encías y puede curarse fácilmente mejorando la higiene bucal y luego, por supuesto, contactando con un dentista. Es posible que el amarillamiento de las encías esté acompañado de llagas, en este caso puede ser una infección viral o una úlcera.
- Blanco: cuando las encías se vuelven blancas, podemos enfrentarnos a dos tipos de problemas. Si las encías están cubiertas de una pátina blanca, entonces normalmente se habla de micosis (o candidiasis oral), una infección que altera la flora microbiana oral y reduce las defensas inmunológicas del cuerpo y requiere asistencia médica. Si, por otro lado, las encías son blancas y doloridas y estàn sensibles y molestas, entonces la causa podría ser una infección viral. También en este caso, se debe consultar a un médico o dentista a su debido tiempo.
- Gris: Si las encías parecen estar cubiertas de una pátina grisácea, entonces la causa es probablemente el debilitamiento del sistema inmunológico que ha permitido que se forme una infección bacteriana. También en este caso se requiere un examen médico.
- Negro: Si las encías parecen negras, entonces pueden ser una preocupación. Normalmente, las encías de este color pueden ser causadas por el tabaquismo o el abuso de drogas o por el uso de algún medicamento en particular. Una vez más, una consulta médica es importante para que podamos entender la causa y encontrar el mejor tratamiento.
¿Cómo tener encías sanas?
Tener una correcta rutina de higiene oral y eliminar la mayor cantidad posible de placa bacteriana es definitivamente la primera regla a seguir para tener siempre las encías sanas y tonificadas. Sin embargo, también es importante tener sesiones de limpieza dental profesional una o dos veces al año.
Para asegurar la salud de nuestra boca y de todo el cuerpo, también es importante eliminar, o al menos intentar reducir, el humo, el azúcar y el alcohol. Mientras que fumar afecta a la circulación sanguínea de las encías, el consumo de alimentos ricos en azúcar, bebidas carbonatadas y alcohol aumenta la proliferación de bacterias que causan la formación de placa dental.
El calcio y la vitamina C también nos ayudan a mantener una boca sana y ayudan a neutralizar la acción de las bacterias y a fortalecer las encías. Por eso es importante añadir a nuestra dieta alimentos como la leche y sus derivados, y frutas y verduras (especialmente cítricos, fresas, lechuga y espinacas).
Cuando se tiene gingivitis se pueden utilizar dos antiguos remedios con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes: salvia y aloe vera. De hecho, el gel de aloe vera puedes utilizarlo para combatir el enrojecimiento y las hojas de salvia para hacer una infusión para usar como enjuague bucal o como bebida.
Los kiwis también pueden ayudar a mantener nuestras encías saludables, especialmente en caso de sangrado. De hecho, cuando nuestras encías sangran, tomar dos kiwis al día podría ayudarnos a reducir significativamente el sangrado.
Sin embargo, nunca dejes de consultar a un especialista. Recuerda que nada ni nadie puede reemplazarlo!